Donostia-San Sebastián

Mobiliario e infraestructuras

Farola Peligrosa

Mobiliario e infraestructuras en Donostia-San Sebastián

Haga click sobre la foto para agrandar

Jesús Mª Echeverría Golina

¿Será una original fuente para saciar la sed veraniega? Bromas a parte, esta imagen se daba el jueves 10, por la mañana, en Portuene, 1 (Bº Antiguo) Donostia. Hace ya bastantes años que, cuando llueve torrencialmente, sale agua por la tapa del registro de esta farola. Una noche que estaba encendida, pegaba cada chupinazo.Esta vez no llovía pero debió haber un reventón en la red de distribución de aguas. Lo que hace sospechar es que, cuando se produce excesivo caudal por el alcantarillado, el agua busca salida por esta farola que debe estar comunicada. Aunque los operarios de aguas acudieron rápidos y quizás la fuga de la red esté ya arreglada, es de temer que el problema de desagües siga igual, lo que supone un gravísimo peligro eléctrico para las personas en una acera estrecha, junto a la parada del autobús y un paso de cebra.

Nota del Ayuntamiento : Al parecer se produjo una rotura en una acometida de agua potable particular, que provocó que el agua buscara la salida a través del tubo del alumbrado y puerta de la farola. Tanto los servicios de Aguas como de Mantenimiento vieron la avería. El particular ha abierto ya una cata y reparado la avería. Falta reponer el pavimento, pero la cata está tapada con una chapa. Así pues, parece que no volverá a salir agua de esa manera.

Más fotodenuncias

Donostia-San Sebastián | Mobiliario e infraestructuras

Pasamanos peligrosos

Imagen

Este pasamanos se encuentra al final de las escaleras del Acuario o al principio de las mismas cuando uno las baja. Tal y como se aprecia en la imagen, su corte oblicuo resulta peligroso ya que bien...

Anónimo

Donostia-San Sebastián | Residuos

Contenedores de pilas

Imagen

28-VIII-2007. ¿Por qué nos inculcaron la recogida de pilas y después este servicio está abandonado? En Egia, junto al Banco Guipuzcoano había un contenedor de pilas, que ya no existe y los que quedan...

Tomás Olmeno