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Julen G.

09-09-2008

Anoche salí de trabajar a las 22:00, llegué a mi barrio (Herrera) hacia las 22:25 y empezó mi periplo para aparcar. Tras visitar Gaiztarro y Bidebieta a las 23:45 conseguí “aparcar” el coche a más de 20 minutos a pie de mi casa. Me quedé horrorizado al ver las obras que se han realizado en Gaiztarro. Desde aquí quiero agradecer a nuestro Señor Alcalde y demás cabezas pensantes del Ayuntamiento por complicarnos un poco más la vida a los trabajadores que no disponemos de garaje y tenemos que coger el coche por obligación. Agradecerles esas enormes aceras que han construido en Gaiztarro, por donde nunca pasa nadie, en detrimento de decenas de plazas de aparcamiento que a muchos nos son imprescindibles. Propongo que a partir de ahora todas las manifestaciones que vayan a celebrarse en la ciudad se hagan aquí para así amortizar semejantes aceras. Antes de realizar una obra de estas dimensiones, se deberían tener en cuenta las verdaderas necesidades de los vecinos.