Mobiliario e infraestructuras
Contenedor amarillo: agujero al infierno
Desde hace ya varios años el contenedor amarillo subterráneo de Plaza Elizondo tiene la sujeción que lo fija al suelo rota y muchas veces se abre solo o se abre cuando vas a tirar los envases y bajas de la plataforma, con el peligro de que ocurra una desgracia y alguien caiga dentro o le de un golpe al abrirse.
No creo que a quien corresponda se arruine por poner un pestillo en condiciones antes de que tengamos que lamentar alguna desgracia.