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Ascensor interior ilegal
Cuando los asuntos municipales requieren una respuesta sensata y equilibrada, no siempre casan, desgraciadamente, con leyes y normas establecidas. En el Pº de Casares de Altza, empezando desde el nº 127 al 151, hay doce portales de idénticas características en cuanto a distribución y espacio se refiere. En uno de los portales están queriendo instalar un ascensor a pesar de sendos certificados, tanto del arquitecto municipal como de los bomberos concretando, exquisitamente, que no existe un mínimo espacio requerido para dicha instalación. ¿Problema? Ninguno. Nuestro ínclito regidor municipal otorga la licencia de obra el mismo día que se solicita, obviando las alegaciones de los vecinos y después de algunas irregularidades expedientales. ¡Y qué decir de la Justicia! Primero ordena la paralización de las obras, para, a renglón seguido, dejar continuar trabajando hasta la definitiva instalación. El juicio a posteriori y demorado en el tiempo deja de ser justicia perdiendo su verdadera esencia. Esta es una decisión perversa que enturbiará, a no dudarlo, las relaciones entre los vecinos del barrio. Para crear problemas, no necesitamos que nadie nos eche una mano. De todo lo expuesto, habrá que colegir que el atajo ilegal de los patanes, es la vía de los hechos consumados.