Civismo
1813 - 2012. La segunda destrucción de Urgull.
Esta ladera desolada y vacia ayer era un bosquete lleno de vida. Y es solo una de las muchas que están deforestando. Al parecer, la única iniciativa tomada hasta la fecha por el consistorio con vistas a la conmemoración del bicentenario de la destrucción y reconstrucción de la ciudad en 1813, consiste en presentar el monte Urgull tan deforestado y asolado como lo dejaron entonces los cañones ingleses. Los que creíamos que era la fobia arbórea o el negocio maderero del anterior regidor, lo que nos hurtaba de la belleza y el recogimiento que nos proporcionaban sus árboles, estábamos equivocados. Ignoramos porque cuando la situación económica es tan mala debida a la pésima gestión de gobierno s anteriores,
el actual consistorio sigue despilfarrando nuestros escasos recursos en destruir la
belleza, el encanto y el valor de nuestro querido Monte Urgull, a donde uno va a
sentir la naturaleza, a buscar intimidad, paz, recogimiento, belleza que le procuran
los árboles. Nos dirán que se han puesto todos enfermos en este último año, y que
hay que cambiarlos por otros. Pues bien, yo prefiero tener árboles aunque no estén
sanísimos a no tener nada. Y si tienen que plantar nuevos, que lo hagan poco a poco
y no todos a la vez.